Una torre de observación sirve para contemplar, pero también para ofrecerse a la vista de los demás. Contemplar, y ofrecer a la vista de los demás lo visto, pretende que la vida cotidiana no se reduzca a actividades y trabajos desgastantes. Sino que como un estetoscopio fiel, pueda percibirse el latido interior y construir resonancias.
sábado, 26 de septiembre de 2009
Aristóteles se quedó pen...sando.
¿Cómo le hace un animal político - Aristóteles dixit- para sobrevivir entre tanto político animal?
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